La Federación Sindical Mundial, en representación de sus 95 millones de trabajadores en 130 países en los cinco continentes, expresa su solidaridad internacionalista con las luchas de los trabajadores de los almacenes de productos químicos en varios centros de distribución, que alzan sus voces pidiendo mejores condiciones de trabajo y salarios dignos.
Los principales problemas a los que se enfrentan los trabajadores son: pago insuficiente, condiciones de trabajo flexibles, situación laboral no permanente para la mayoría y condiciones de trabajo peligrosas e inaceptables, con varios incidentes de intimidación y hostigamiento de todo tipo.
El movimiento sindical internacional de clase suma su voz a la de los trabajadores de “Australian Chemist Warehouse” (almacenes de productos químicos de Australia) para exigir la plena satisfacción de sus demandas sin excepciones o exenciones.