La FSM que es la voz militante de 92 millones de trabajadores en 126 países del mundo entero, declara su solidaridad internacionalista con el pueblo de Venezuela que una vez más se encuentra en el epicentro de la arremetida imperialista. Al mismo tiempo, rechazamos de la manera más rotunda las insidiosas maniobras jurídicas y políticas de los agentes del imperialismo dentro de la OEA, en contra del pueblo venezolano.
Para nosotros, nunca fue un secreto que los EEUU y las uniones transnacionales de los imperialistas como la OTAN y la Unión Europea quieren silenciar cada voz que difiere de la suya; o sea quieren acabar con cada voz que resiste al pillaje de los recursos naturales, que no está de acuerdo con sus políticas económicas. Su fiel colaborador para el dominio en la región de América Latina y el Caribe, fue y sigue siendo la OEA que defiende la rentabilidad de los monopolios estadounidenses; se habla de la misma OEA que a través de su Secretario General, Luis Almagro, quiere
proseguir con los planes de desestabilización en Venezuela que forman parte de una guerra mediática y económica generalizada.
Por nuestra parte, señalamos una vez más que los pueblos son los únicos que tienen el derecho de decidir sobre su propio presente y futuro. La FSM hace un llamamiento a la clase trabajadora venezolana así como a los trabajadores de toda la región de América Latina a estar alertos contra los planes de los halcones del imperialismo estadounidense. En todos los casos, como nos enseña la historia, los pueblos siempre han sido los que determinan en definitiva los acontecimientos políticos. Por eso, reiteramos nuestra solidaridad internacionalista y brindamos todo nuestro apoyo de clase al pueblo de Venezuela.
¡Alto a la agresividad imperialista!
¡Viva la clase trabajadora de Venezuela!