Las inundaciones mortales en Pakistán son otra prueba de que los pueblos del mundo no están protegidos contra los fenómenos naturales, a pesar del avance tecnológico. Los que sufren la condena de la pobreza, las enfermedades, las guerras imperialistas y la inmigración masiva por la agresividad imperialista y la barbarie, sufren también la condena de la inseguridad, la incertidumbre y la miseria debido a la falta de medidas de protección contra las inundaciones (así como medidas de protección contra terremotos e incendios).
La Federación Sindical Mundial reafirma su solidaridad con el pueblo de Pakistán por la calamidad nacional causada por las peores inundaciones en casi un siglo. La devastación causada por las inundaciones ha causado la muerte a miles de personas y más de 20 millones de personas han perdido todas sus pertenencias.
Seguimos de cerca todos los acontecimientos en la zona y expresamos nuestro apoyo moral a todos los sindicatos y afiliados que van a reconstruir su país y las condiciones de vida del pueblo de Pakistán.
Una vez más, expresamos nuestra plena solidaridad con la clase obrera de Pakistán y esperamos que puedan encontrar la fuerza para superar esta tragedia.
Hacemos un llamamiento a todas las organizaciones sindicales del mundo a apoyar al pueblo y la clase obrera de Pakistán, con todos los medios posibles prácticos y materiales.